He decidido coger un juego un poco "antiguo" y
desempolvarlo, del año 1998, cuando los juegos eran de apenas 200 o 300 megas y
que cualquier ordenador de ahora podría soportar sin apenas despeinarse de
ninguna manera. Hablo del juego "Starcraft 1" o simplemente
"Starcraft".
Este juego fue
creado hace ahora más de 11 años, 14 años concretamente, por la mano de
la compañía "Blizzard" y narra la historia futurista de un
personaje llamado "Jim Raynor" y su relación con las tres razas
inteligentes que existen en el universo "Starcraft" (al menos las
conocidas), manteniendo así entre las tres un buen triángulo equilibrado que no
favorece a ninguna raza sobre las demás, sino que cada una tiene sus puntos
fuertes y sus puntos flojos: los Protoss, seres de avanzada inteligencia y
tecnología creados por los Xel'Naga que fueron
"desechados", los Terran, antiguos terrícolas que en generaciones
anteriores fueron enviados como colonos al espacio y los terribles Zergs,
creados también por los misteriosos Xel'Naga por su afán de la búsqueda
de la raza perfecta.
Análisis:
El juego en sí,
dadas las maravillas tecnológicas existentes hoy en día, está desfasado a nivel
técnico de manera considerable, aunque por otra parte es totalmente lógico,
pues hablamos de un juego que tiene años de antigüedad, por lo que si lo ves en
una tienda tipo "Game" o similares, y buscas un entorno realista,
mejor comprarse la segunda parte o la expansión de la segunda parte, pues a
este nivel, deja mucho que desear. Ahora, si damos un viaje hacia el pasado y
tomamos en cuenta el aspecto gráfico de la época, estamos ante un título
sobresaliente en este aspecto. Optimiza muy bien el motor gráfico con el que
fue diseñado, pues hablamos de 1998.
No obstante, si lo
que buscas es una historia atrayente desde el primer minuto prácticamente y no
te ves influenciado por el hecho de que tenga o no buenos gráficos, sin duda
alguna, esta joya podrá darte horas de entretenimiento, pues su campaña
principal está dividida a su vez en tres campañas, durante las cuales dominaras
a cada una de las anteriormente citadas razas que componen este maravilloso
universo, contando cada una con 10 misiones. En la variedad está el gusto y los
objetivos de la campaña son lo suficientemente variados para que los resuelvas
sin aburrirte durante todas las partidas que te eches, aunque en algunos
momentos la excesiva dificultad que presenta puede hacerte decidir que no
quieras seguir jugando durante un tiempo. Esto no es lo más normal, y no
deberías asustarte, sino irte a dormir y al día siguiente pensártelo y hacer la
misión. Además, como añadido, siempre te puedes hacer con una copia de
"Blood War", primera y única expansión de este juego, que ofrece
otras 30 misiones ofertadas de similar manera que el juego básico: 10 para cada
raza.
A nivel sonoro, el
juego está totalmente en español (al igual que su segunda entrega), tanto
textos en pantalla, como manual e incluso, las voces de las unidades están en
español (menos las de los Zerg, por motivos más que obvios para los seguidores
de esta saga, ha sido imposible traducir las voces de estos seres, aunque los
cerebrados y la reina de espadas sí que hablan en nuestro idioma natal). En
otro ámbito del apartado sonoro, la música variará según el estado en el que
nos encontremos, siendo una música tranquila y serena para una misión tranquila
y serena, o un momento en el que no tengamos apuros, y ruidos de armas ( las
armas de los combatientes) si tenemos la cámara posada sobre el campo de
batalla directo, que supondremos que estaremos en apuros y rodeados de armas.
Mención aparte
merece el manual, pues una de las versiones del juego que tengo en mi posesión
(sí, tengo varias, concretamente 2) traía consigo un libro mezclando el clásico
manual que te muestra las unidades, edificios y demás con las historias e
intrigas más importantes del juego (por citar un ejemplo, se narran las
motivaciones de Arturus Mengsk para ser un líder revolucionario) con dibujos representativos
de las unidades y algunos bocetos de lo que podrían haber sido algunas unidades.
La trama, como ya
hemos dicho antes, se divide en un modo de un jugador subdividido en tres
campañas, poniendo en nuestras manos a cada una de las razas. En la primera,
tendremos el control de los "terrans", que básicamente son los
humanos de toda la vida, metidos dentro de una servoarmadura y mandados al
combate. La principal diferencia, es que en este caso, no estamos ante humanos
cualquieras, estamos ante "presos", pues la mayor parte de los
componentes de las filas terrans son presidiarios que cumplen condena en el
ejército, sea cual sea el motivo por el que fueron encarcelados y en esta
campaña verás desde el punto de vista de Raynor su paso desde el lado de los “buenos”,
ser traicionado por los “buenos”, aliarse con los “malos” y luego estos
traicionar a Raynor. Lo que viene siendo una historia normal en la que todos
dicen ser una cosa, pero nadie cumple nada. Esto se podría tomar como una
crítica al sistema político por parte de los chicos de Blizzard, pues en muchos
comentarios que se hacen en medio de las conversaciones se puede notar las
connotaciones políticas.
En la segunda
campaña, nos meteremos en el papel de los abominables Zergs y de su reina de
espadas, cuya única finalidad es absorber especies para crecer como
raza. Aquí tendremos el punto de vista de Zarah Kerrigan, amiga íntima de
Raynor que fue transformada en Zerg, en la Reina de Espadas y de su ascenso,
pasando de ser una crisálida a su transformación absoluta y su entramado para
hacerse con el poder de los Zergs.
Por último, nos metemos en las carnes de un "comandante"
Protoss, con la misión de erradicar mundos enteros que hayan sido
"maldecidos" por los Zergs, hasta que entra en razón y asume que
erradicar sin más y sin prueba alguna razas enteras y mundos poblados no es
ético, pues el fin no justifica la causa cuando se tiene en cuenta tantas vidas
inteligentes, ganándose así la desaprobación de sus líderes y teniendo que
buscar amistades por otros lados, como Jimi (Raynor) o los Protoss “exiliados”.
CONCLUSIONES:
Como conclusión
solo queda repetir lo que dije en las primeras líneas, si buscas un juego
potente a nivel gráfico, deja la caja del videojuego "Starcraft",
pero si buscas algo que te atraiga, saca ese DVD (si es la versión del 2004) o
ese CD y prepárate para vivir una de las mejores experiencias del mundo de los
videojuegos. Por cierto, quien haya jugado a este juegazo sabrá porque escogí
las imágenes representativas de las razas o al menos lo podrá intuir.
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